Un devastador informe de la Contraloría General de la República, al que tuvo acceso exclusivo la Revista CAMBIO, desnuda la crítica situación de Nueva EPS, la entidad prestadora de salud más grande de Colombia, que atiende a 11,5 millones de afiliados. El documento de 82 páginas, que hasta ahora no había sido público, detalla un deterioro financiero y operativo sin precedentes en los últimos tres años, agravado tras la intervención del Gobierno de Gustavo Petro en abril de 2024. La auditoría sentencia: la EPS enfrenta un escenario de “inviabilidad estructural” que pone en riesgo los recursos del sistema de salud y la atención de millones de colombianos.
Un abismo financiero en aumento
El informe revela que, entre diciembre de 2022 y marzo de 2025, la deuda de Nueva EPS creció un 198 %, pasando de 5,42 billones a 21,37 billones de pesos. La Contraloría proyecta que, de seguir esta tendencia, el pasivo podría cerrar 2025 en 26,39 billones. Más alarmante aún es la situación del patrimonio: en 2022, la entidad reportaba un saldo positivo de 485.209 millones de pesos, pero en 2023 se desplomó a -4,95 billones, y para marzo de 2025 alcanzó un déficit de -6,25 billones. Se estima que, para diciembre de este año, el patrimonio negativo llegará a -9,16 billones.
“Se proyecta un escenario de inviabilidad estructural que pone en riesgo los recursos del sistema de salud y la atención de millones de colombianos”, advierte el informe, destacando que la intervención gubernamental, lejos de estabilizar a la entidad, parece haber coincidido con un empeoramiento de los indicadores clave.
Contratos cuestionables y relaciones opacas
Otro hallazgo preocupante es la concentración de contratos millonarios en un grupo reducido de empresas y uniones temporales, algunas sin contratos formalizados. La Contraloría identificó nueve uniones temporales con vínculos comerciales no documentados, lo que representa “riesgos jurídicos, operativos, fiscales y reputacionales”. En cuatro de estas uniones aparece Carlos Alberto Flórez Polanía, representante de Bienestar IPS, una entidad vinculada al grupo Zentria, parte del fondo de inversión Patria, dirigido por Carolina Buendía, expresidente de Sanitas.
Bienestar IPS también ha sido señalada en investigaciones periodísticas de W Radio y en una denuncia presentada por el exsuperintendente Luis Carlos Leal ante la Fiscalía en octubre de 2024, donde se alertó sobre una supuesta confabulación para concentrar contratos en varias EPS, incluyendo Nueva EPS.

Caos interno y facturas sin auditar
La auditoría también expone graves fallas en la gestión interna. Nueva EPS acumula 13,17 billones de pesos en facturas pendientes de auditoría entre 2020 y 2025, de las cuales el 99 % corresponde a 2024 y el primer semestre de 2025. Según Enrique Lanchero, vicepresidente de Transformación Digital de la entidad, los procesos de cuentas médicas son manuales, lo que aumenta la vulnerabilidad de la EPS y distorsiona su realidad financiera.
Además, la Contraloría detectó una subestimación de 11,1 billones de pesos en las reservas técnicas, esenciales para garantizar el pago de servicios de salud. Este desfase, sumado a un incremento del 155 % en anticipos sin legalizar (de 3,4 billones en 2023 a 15,31 billones a junio de 2025), pone en jaque la sostenibilidad financiera de la entidad.
Insatisfacción y judicialización en aumento
La crisis no solo es financiera. Entre 2022 y el primer semestre de 2025, las peticiones, quejas y reclamos (PQR) aumentaron un 151,6 %, pasando de 177.479 a 446.520. Las principales quejas están relacionadas con dificultades de atención, trámites administrativos y autorizaciones. Asimismo, las tutelas crecieron exponencialmente, alcanzando un pico de 66.135 en el primer semestre de 2025. La Contraloría advierte que, de no tomarse medidas urgentes, esta tendencia seguirá en aumento, reflejando una insatisfacción generalizada entre los usuarios.
Una intervención sin resultados
La intervención de Nueva EPS, ordenada por el Gobierno Petro tras el hundimiento de la reforma a la salud en 2024, buscaba rescatar un sistema al borde del colapso. Sin embargo, el informe de la Contraloría, revelado por CAMBIO, sugiere que las medidas adoptadas no han logrado estabilizar a la entidad. Por el contrario, los indicadores reflejan un agravamiento de la crisis, con un paciente que, según los expertos, podría estar en fase terminal.
El presidente Petro ha defendido la intervención, acusando a la administración anterior de Nueva EPS de ocultar deudas por 5 billones de pesos en 2023. Sin embargo, los datos muestran que, bajo la gestión estatal, los problemas financieros y operativos han escalado, dejando en incertidumbre el futuro de la salud de millones de colombianos.
**Créditos:** Esta nota se basa en el informe exclusivo de la Contraloría General de la República, revelado por la Revista CAMBIO, cuya investigación periodística ha permitido arrojar luz sobre la crisis de Nueva EPS.