Hasta el 22 de mayo están abiertas las inscripciones para el Concurso Nacional, Filminutos, ‘Una Historia sin Nicotina’, la convocatoria invita a jóvenes, entre los 14 y 30 años, a que produzcan una pieza audiovisual creativa de máximo un minuto, que hable sobre la ‘relación tóxica’ que se genera por el consumo del tabaco y los cigarrillos electrónicos o ‘vapeadores’.
La organización
Todo se realiza en el marco del Día Mundial Sin Tabaco, que lo organiza la Liga Colombiana Contra el Cáncer, con sus 32 Seccionales y Capítulos. Es de señalar que el evento tiene el apoyo de la Fundación Anáas, la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte de Bogotá, Idartes, Telefónica Movistar, la Academia de Artes Guerrero, Saman, entre otros aliados.
Premios hasta el quinto puesto
Serán seleccionados los cinco mejores Filminutos, que recibirán premios de $3.000.000 COP para el primer lugar, $1.500.000 COP para el segundo puesto, $800.000 COP para el tercer lugar y $400.000 COP para el cuarto y quinto puesto.
¿Cómo inscribirse?
En este caso, los términos y condiciones del concurso se pueden consultar en www.ligacancercolombia.org
El anuncio de los ganadores será el 31 de mayo en la intervención artística y cultural que se realizará en una plaza pública de Bogotá, donde se proyectarán los videos ganadores y los mejores 100 Filminutos a través de una pantalla de gran dimensión.
El jurado
El Concurso contará con un jurado conformado por el influenciador y fotógrafo Sebastián Moreno; Ana María Lozano, curadora e investigadora de artes visuales; Luisa Guerrero, subdirectora de la Academia de Artes Guerrero; Blanca Llorente, economista, salubrista pública y asesora en temas de tabaco para la LCCC y el doctor, Carlos Castro, asesor científico de la Liga Colombiana Contra el Cáncer.
“Hoy hay menos fumadores en Colombia, pero tenemos nuevos retos como los cigarrillos electrónicos. Estos productos aún no están regulados eficazmente en el país lo que los hace muy asequibles para niños y jóvenes, público objetivo prioritario de la industria para atraer a nuevos clientes”, asegura Blanca Llorente, quien fue este año reconocida por la OPS y la OMS, con el galardón ‘World No Tobacco Day awards 2023’ por sus contribuciones de largo plazo en la investigación y defensa para el control del tabaco tanto en Colombia como en la región de América Latina.
“Los estudios, basados en evidencia y libres de conflictos de interés, demuestran que estos artefactos son altamente dañinos para la salud y que no son un mecanismo seguro para dejar de fumar. Es urgente una regulación protectora para prevenir que aumente su amenaza para la salud pública del país, especialmente, en la población más joven’, agrega Llorente,
En el marco del Día Mundial Sin Tabaco, la Liga Colombiana Contra el Cáncer, sus Capítulos y Seccionales en todo el país, en mayo desarrollarán una agenda de capacitaciones, jornadas pedagógicas, acciones de promoción y entrega de materiales educativos en colegios, universidades, empresas públicas y privadas y medios de comunicación, con el propósito de sensibilizar y generar consciencia sobre el tabaquismo y sus consecuencias.
En Colombia
En el país el consumo de tabaco no solo representa la quinta causa de muerte y discapacidad, y la muerte de 88 personas cada día, también tiene impactos negativos en la economía y el medio ambiente del país.
Los costos
El tabaquismo le cuesta a Colombia al menos 17 billones de pesos anuales: al sistema de salud $6,5 billones y $10,6 billones en pérdidas de productividad, lo que equivale aproximadamente al 1,8 por ciento del PIB nacional.
Contaminación
Su cultivo, fabricación y consumo destruyen el medio ambiente. Se calcula que en el país se generan 5 mil millones de colillas al año, que se convierten en residuos sólidos tóxicos y contaminan 5 billones de litros de agua con metales pesados y colillas que son plásticos de único uso.
Los cigarrillos electrónicos
Los cigarrillos electrónicos, que suelen denominarse de manera engañosa como “vapeadores”, vienen en diferente presentación, pero causan también daños graves. En su mayor parte, son dispositivos electrónicos para suministrar nicotina; estos calientan una solución líquida para crear aerosol (no es vapor).
La OMS advierte que el uso de estos productos incrementa tres veces más el riesgo de fumar cigarrillos convencionales e incluso de otras sustancias psicoactivas, y de generar adicción.