Luego de 12 años de presentarse, al parecer, un millonario desfalco, La Fiscalía General de la Nación acusó formalmente a Wilson Escarria Camacho, un exjuez laboral de Buenaventura en el Valle del Cauca, de fallar de manera irregular siete procesos en favor de un grupo de 800 profesores que reclamaba el pago de los dineros que, supuestamente, les debía reconocer el empleador por retrasos en la consignación de las cesantías.
El caso
Los elementos de prueba indican que, en el año 2011, el entonces funcionario judicial, al parecer, desconoció varias normas legales para beneficiar a los educadores que demandaron al Fondo de Prestaciones Sociales del Magisterio.
Las anomalías
-Se estableció que el entonces juez debía rechazar las pretensiones porque los peticionarios no anexaron el título ejecutivo que daba cuenta del posible incumplimiento por parte del empleador.
-Se constató que asumió el estudio de hechos prescritos, y notificó sus decisiones a la Alcaldía de Buenaventura y no al fondo demandado.
-Fijó pagos para los docentes, más honorarios para los abogados que los representaron; y dispuso el embargo de cuentas bancarias que administraban recursos públicos para garantizar el desembolso de 11.281 millones de pesos para los profesores.
Los delitos
Por estos hechos, un fiscal de la Dirección Especializada contra la Corrupción acusó al exjuez Escarria Camacho siete eventos de peculado por apropiación en favor de terceros agravado y 21 casos de prevaricato por acción. La etapa de juicio se realizará a instancia del Tribunal Superior de Bogotá.
Más Investigaciones
En este sentido, la Fiscalía investiga en otras regiones del país casos similares, que en muchas ocasiones con conocimiento de causa indujeron al error para que altas sumas de dinero fueran depositados de manera irregular.