El Gobierno Nacional pretende acabar con el crédito usurero llamado ‘Gota a Gota’, el cual cobra intereses del 20 y hasta el 50 por ciento divididos en cuotas diarias, y a un mes de plazo. Cabe decir que los trabajadores son los principales ‘clientes’ de este ‘negocio’, a quienes por lo general amenazan ante el atraso en los pagos. 

A quienes prestarán el dinero

En este caso, según las cuantas del Gobierno, se otorgará un millón de créditos a vendedores ambulantes, tenderos, recicladores y productores agropecuarios de bajos ingresos que necesitan acceder a financiación y desarrollar capacidades financieras para hacer crecer sus negocios o proyectos productivos. “Muchos de ellos están a merced del ‘gota a gota’. Por esta razón, buscamos ofrecer diferentes alternativas que se conviertan en la puerta de entrada al sistema financiero”, señaló Paola Arias, directora de Banca de las Oportunidades.

El monto de los créditos 

El Ministerio de Hacienda y Crédito Público, a cargo de José Antonio Ocampo, dijo que los créditos irán desde $500 mil hasta $4 millones.

La estrategia 

En este caso, se trata de la llamada economía popular (EP) “CREO, un crédito para conocernos”, que atenderá las necesidades de financiamiento de las unidades productivas de baja escala. “CREO, un crédito para conocernos, diseñado con el acompañamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se erige como la estrategia más inclusiva jamás ejecutada en Colombia, y que apunta a cerrar desigualdades históricas y generar financiación accesible y flexible, como una palanca clave para potenciar la generación de capacidades, el bienestar financiero y la transformación de las condiciones de vida de la economía popular”, precisó el ministro Ocampo.

Las cuentas 

Según la encuesta de Micronegocios (Emicron) del DANE, al cierre del 2022, de los 5,3 millones de micronegocios en el país, apenas el 30% cuenta con financiación formal. Además, uno de cada cuatro micronegocios que solicitó un crédito lo hizo a través del “gota a gota”. Este número ha venido creciendo desde la pandemia.

Los bancos 

En este caso, los bancos públicos serán fundamental para concretar la idea, que hace parte del Grupo Bicentenario. Bancóldex, Finagro-FAG y FNG, de manera articulada y coordinada, activarán un paquete de servicios financieros y no financieros para apalancar créditos productivos populares través de la red de proveedores de servicios financieros.

El Banco Agrario liderará la colocación de financiación para la Economía Popular. Por su parte, el sector financiero cooperativo, dada su vocación y cercanía a la población, será un aliado clave de esta estrategia, desde el Gobierno se viene trabajando, junto con el sector, en un programa de fortalecimiento.

Apoyos 

La estrategia se enfocará en fortalecer y ampliar la red de proveedores de servicios financieros, en especial de las cooperativas, las Fintech, los bancos de nicho, las ONG microcrediticias y los bancos comerciales. Así mismo, en impulsar metodologías innovadoras y disruptivas; y acelerar iniciativas gubernamentales, como los esquemas de finanzas y datos abiertos, buscando que las nuevas tecnologías apalanquen la irrigación de créditos. 

“El Grupo Bicentenario tiene dentro de sus objetivos apoyar al Gobierno nacional a identificar y corregir fallas de mercado, tales como la falta de cobertura de servicios financieros en las regiones más apartadas o la ausencia de información que restringe el acceso el crédito para los sectores más vulnerables. Esta estrategia, a través de las empresas participantes, propenderá por acercar a las personas de la EP a cumplir sus sueños, contribuyendo con el desarrollo del país.”, precisó Adriana Mazuera, representante legal del Grupo Bicentenario.

Sin historial crediticio 

Principalmente se pretende brindar acceso al crédito a aquellos ciudadanos que, hasta el momento, no han sido partícipes del sistema financiero. La meta es visibilizar a la economía popular, promoviendo su inclusión financiera.

Las garantías 

Las entidades del Grupo Bicentenario, ofrecerán una gama de instrumentos inclusivos: 

  • Garantías silenciosas destinadas a perfeccionar la gestión de riesgos
  • Financiamiento concesional, cuyo propósito es fomentar innovaciones operativas que impulsen el acceso a recursos en condiciones favorables.
  • Incentivo al buen pago, que promueva hábitos financieros saludables y responsables entre los beneficiarios.

Los dos primeros incentivos adoptarán un enfoque territorial y de género, A lo largo de este primer año se llevará a cabo la implementación progresiva de incentivos en 100 mil operaciones crediticias.

¿Desde cuándo?

En este sentido está pendiente la fecha de inicio de este programa y el monto de interés que cobraría cada entidad, se espera que sea a mediados de este año. 

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