Pasto — La celebración de Halloween en la capital nariñense se vio empañada por un hecho violento que ha generado conmoción y preocupación en la ciudadanía. En la noche del 31 de octubre, el teniente coronel en retiro del Ejército Nacional, Ariel Nelinho Mora, disparó contra su exesposa y su hijo, Sebastián Mora, para luego quitarse la vida.

El ataque ocurrió en un establecimiento del norte de la ciudad, donde el exmilitar se reunió con su familia. Según las autoridades, tras un breve encuentro, Mora desenfundó un arma de fuego y disparó en repetidas ocasiones: tres impactos contra su hijo y dos contra su exesposa. Sebastián, de 27 años, era médico en formación y realizaba su internado en el Hospital Departamental de Nariño. Fue trasladado a un centro asistencial, donde falleció minutos después. Su madre permanece en cuidados intensivos con pronóstico reservado.

Luego del ataque, el agresor huyó en un vehículo particular, posteriormente abordó un taxi y, tras comunicarse con su madre para pedir perdón, se suicidó con un disparo en la cabeza.
El secretario de Gobierno de Pasto, Giovanny Guerrero, expresó su preocupación por la reiteración de hechos violentos que involucran a miembros activos y retirados de las Fuerzas Armadas. “Quizá las enfermedades mentales están perturbando la integridad de estas familias”, señaló, haciendo un llamado a revisar los mecanismos de atención psicosocial para esta población.

El comandante de la Policía Metropolitana de Pasto, coronel Hernando Calderón, indicó que el caso está en investigación y que las primeras versiones apuntan a conflictos familiares como posible detonante del crimen.

Este hecho se suma a un balance preocupante durante la jornada de Halloween en Pasto, que registró más de 250 llamadas de emergencia, al menos 16 riñas y una caravana de motociclistas que alteró el orden público en varios sectores de la ciudad.

La comunidad exige respuestas y acciones concretas para prevenir este tipo de tragedias, que evidencian la necesidad de fortalecer la salud mental y la prevención de violencias intrafamiliares, especialmente en contextos de alta tensión emocional.
